miércoles, 14 de noviembre de 2012

Resumen según Clarson de la partida I


Por un motivo u otro todos nos reunimos en la posada del padre Anthony. Una vez allí nos explico que había un plan para asesinar al próximo arzobispo de Canterbury.

El grupo un tanto pintoresco decidió con la ayuda del padre ir por la noche a inspeccionar las seguridades de la catedral para poder rescatar al antiguo capitán de la guardia que había sido encarcelado junto con otras muchas personas que iban a ser colgados como cabezas de turco.

El padre Anthony nos acompaño y pudimos ver las medidas de seguridad y trazar un plan. También nos informo de que había una ruta alternativa para poder sacar al capitán de la guardia.
Decidimos esperar hasta que faltar 2 días para el nombramiento y por la noche nos colamos en la catedral para rescatar al capitán de la guardia y liberar a los campesinos.

Decidimos ir por la puerta utilizando como excusa la revisión de los prisioneros ya que parecían que tenían alguna enfermedad contagiosa. Una vez allí nos libramos de ellos pinchándolos en la mano con unas puntas de cerbatana impregnada de somnífero. Después los tiramos por el pozo. 3 de nosotros nos quedamos como excusa siendo golpeados por nuestros propios compañeros e inyectados con cloroformo para utilizar como excusa que nos habían atacado 2 de los nuestros.

El capitán junto con nuestros compañeros y los 7 campesinos que consiguieron sobrevivir por el pozo se juntaron con el padre Anthony en una de mis granjas en las afueras de Canterbury.

Después de ser interrogados nos dirigimos a la misma granja para hablar con el capitán.

El nos explico que la guardia estaba comprada y que unos hombres con ropas marrones paneaban matar al arzobispo.

El día de la coronación nos infiltramos entre la gente con la “esperanza” de “detener” el asesinato del arzobispo.

2 de los nuestros detectaron a alguien apostado entre las ruinas armado con una ballesta para matarlo aunque pudieron evitarlo y matarlo. En ese momento se creó una desbandada perfecta para conseguir mi venganza.

Pimienta cogió al arzobispo y se refugió en una de las salas con la esperanza de poder salvarlo.

Los demás compinches decidieron sacrificarse cuando vieron que era imposible llegar a cumplir su plan. Y de paso proteger a quien los había……..

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